y mi casa era de madera, de suelo de madera y jardín.
Metía mis pies entre las hendiduras de la madera y los guardaba entre las sombras del jardín
mi casa era de madera, de suelo de madera y jardín y sombra.
La sombra cambiaba mi casa al pasar de las horas
era el dueño de casas infinitas
mi casa era de madera, de suelo de madera y jardín y sombra y tiempo.
Crecía, se ocultaba y fluía como un río invertido sobre un lecho de nubes estáticas
mi casa era de madera, de suelo de madera y jardín y sombra y tiempo y río
y tú.
Tú eres demasiado grande como para encontrar las palabras que te describen
algo sé; estando contigo, olvido las hendiduras de la madera, la sombra del jardín
mi casa infinita, mi casa de madera y agua.
Se detiene, todo se detiene...
viernes, 23 de diciembre de 2011
viernes, 9 de diciembre de 2011
Palabras rebeldes
entran por mi ventana y me sacuden la mañana
llegan sin avisar ysejuntan
ríen, sueñan, desesperan y salen volando
se disfrasan de malas palabras pero yo las reconozco, sé dónde están.
Sal de ayi palabra mal escrita -a manera de conjuro-
y salen si, pero nunca en silencio.
ARMAN ALBOROTO Y DESORDENAN MI HABITACIÓN
así que las tomo y las revuelvo entre oraciones imprecisas
frish frash frish frash frish frash -más que revolver son estrujadas, me desgastaron las breves pausas-
así que poco a poco las voy borrando
con a g u a y
s i l e n c i o. .
.
llegan sin avisar ysejuntan
ríen, sueñan, desesperan y salen volando
se disfrasan de malas palabras pero yo las reconozco, sé dónde están.
Sal de ayi palabra mal escrita -a manera de conjuro-
y salen si, pero nunca en silencio.
ARMAN ALBOROTO Y DESORDENAN MI HABITACIÓN
así que las tomo y las revuelvo entre oraciones imprecisas
frish frash frish frash frish frash -más que revolver son estrujadas, me desgastaron las breves pausas-
así que poco a poco las voy borrando
con a g u a y
s i l e n c i o. .
.
sábado, 3 de diciembre de 2011
Hay en el aire el retardo de la niebla
Hay en los árboles la tersura de la niebla, la suavidad,
y en el río la pausa de la niebla.
Todo duerme respirando niebla.
El sueño del zorro es suave pausa retardando.
El sueño del lobo es sólo niebla.
La niebla sueña con ríos inmóviles, amedrentados.
El pez no duerme.
El hombre cava al pie de la montaña,
junto a los árboles, cerca del río,
lejos de los caminos, al ritmo suave de la niebla.
Hay en el aire...
El pez no duerme.
El hombre sería alboroto, ventarrón, pero cava en silencio,
obedece a la niebla.
Cava.
Los matorrales bruscos le dan la espalda.
No hay gota de sudor sobre su cuerpo.
La niebla ocupa al momento la tierra desterrada.
El hombre es más de tierra que la tierra,
claro de sal o mansedumbre,
piedra de río a quien menea la niebla, piedra flexible,
serena como es sereno el desierto,
como los bosques de algas,
y como ambos iracundas flechas lentísimas apuntando al forastero
silenciosas
(¿a quién acepta el alga o el desierto?).
El hombre viste niebla.
Lo protege la noche y una vela encendida
donde danzan su muerte los mosquitos festivos.
Lo alumbran los tímidos cocuyos.
Carmen Boullosa
Este poema es parte del post anterior, la pregunta sería ¿Cuál fue escrito antes? ¿No altera el significado de uno la existencia del otro? Entre tantas preguntas, una de tantas respuestas...
Vivimos poéticamente.
y en el río la pausa de la niebla.
Todo duerme respirando niebla.
El sueño del zorro es suave pausa retardando.
El sueño del lobo es sólo niebla.
La niebla sueña con ríos inmóviles, amedrentados.
El pez no duerme.
El hombre cava al pie de la montaña,
junto a los árboles, cerca del río,
lejos de los caminos, al ritmo suave de la niebla.
Hay en el aire...
El pez no duerme.
El hombre sería alboroto, ventarrón, pero cava en silencio,
obedece a la niebla.
Cava.
Los matorrales bruscos le dan la espalda.
No hay gota de sudor sobre su cuerpo.
La niebla ocupa al momento la tierra desterrada.
El hombre es más de tierra que la tierra,
claro de sal o mansedumbre,
piedra de río a quien menea la niebla, piedra flexible,
serena como es sereno el desierto,
como los bosques de algas,
y como ambos iracundas flechas lentísimas apuntando al forastero
silenciosas
(¿a quién acepta el alga o el desierto?).
El hombre viste niebla.
Lo protege la noche y una vela encendida
donde danzan su muerte los mosquitos festivos.
Lo alumbran los tímidos cocuyos.
Carmen Boullosa
Este poema es parte del post anterior, la pregunta sería ¿Cuál fue escrito antes? ¿No altera el significado de uno la existencia del otro? Entre tantas preguntas, una de tantas respuestas...
Vivimos poéticamente.
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