Escribo esto después de una noche de trabajo en mi habitación.
No termino mi tarea y no evito recordarte
Y las noches en que amanecí contigo.
Tu desde allá.
Yo aca retrasado 6 horas en el tiempo.
Ambos frente a la pantalla del ordenador.
Mirando la pantalla -Mirándonos a la cara-
Tocando la pantalla de vez en cuando
Como si estuviera acariciando tu mejilla.
Y deseando y viviendo el beso en la distancia.
sábado, 24 de abril de 2010
viernes, 9 de abril de 2010
Escribe jardinero
Escribe...
Que el tiempo de lluvia está llegando y las flores esperan de ti sus más remotas caricias
no hay tiempo para el dormir ni para la calamidad,
los mundos desean ser descubiertos y el paso de tu pluma espera vigilante.
Las historias que no han sido escritas luchan entre ellas y la sequía no termina.
Escribe jardinero
Que las flores de las leyendas ignotas se marchitan si no las recuerdas
que la música de los mitos nunca dejen de sonar
¡Ya es hora de batalla, de aventura, de pasión y de magia!
-Recuérdela sobre todo a ella-
¡Que suenen las trompetas y los tambores!
-Claro, ¿Cómo podría olvidarte?-
¡Está pronta a comenzar tu más grande aventura
vive!
Así que escribe jardinero, escribe
Revive...
Que el tiempo de lluvia está llegando y las flores esperan de ti sus más remotas caricias
no hay tiempo para el dormir ni para la calamidad,
los mundos desean ser descubiertos y el paso de tu pluma espera vigilante.
Las historias que no han sido escritas luchan entre ellas y la sequía no termina.
Escribe jardinero
Que las flores de las leyendas ignotas se marchitan si no las recuerdas
que la música de los mitos nunca dejen de sonar
¡Ya es hora de batalla, de aventura, de pasión y de magia!
-Recuérdela sobre todo a ella-
¡Que suenen las trompetas y los tambores!
-Claro, ¿Cómo podría olvidarte?-
¡Está pronta a comenzar tu más grande aventura
vive!
Así que escribe jardinero, escribe
Revive...
martes, 6 de abril de 2010
Tú que no sé quien eres
Tú que lees estos versos que escribí hace cien años oye:
No puedo ofrecerte una sola flor de todo el tesoro de la primavera
Ni toda la luz de estas nubes de oro
Pero abre tu ventana; y mira, y coge
entre la flor de tu jardín,
el recuerdo oloroso de las flores
que hace cien años murieron.
¡Y ojalá puedas sentir en la alegría de tu corazón
la alegría viva que esta mañana de abril te mando,
a través de cien años
Cantando dichosa!
R. Tagore
No puedo ofrecerte una sola flor de todo el tesoro de la primavera
Ni toda la luz de estas nubes de oro
Pero abre tu ventana; y mira, y coge
entre la flor de tu jardín,
el recuerdo oloroso de las flores
que hace cien años murieron.
¡Y ojalá puedas sentir en la alegría de tu corazón
la alegría viva que esta mañana de abril te mando,
a través de cien años
Cantando dichosa!
R. Tagore
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