Hace tiempo que no escribo a menudo, para ser exactos fue desde que terminé el jardinero, el último de mis cuentos. Inclusive pensé en abrirme otro blog (cosa que si voy a hacer)
pero mientras tanto he decidido no cerrar este.
En el post de hoy coloco por título "escribir en la oscuridad" pero ¿A qué me estoy refiriendo?
Son muchas veces las cosas que uno escribe que deben ser para si mismo, claro que me gustaria que mucha gente leyera mi blog y tener por cada post comentarios de me gustas como escribes o cual es tu dirección amor o incluso, amenazas de muerte de vez en cuando no estarían mal.
El asunto es que eso no siempre pasa.
Asi que tu que lees esto, piensa, cuando te guste hacer algo, nos es malo que de vez en cuando lo hagas sólo para ti, regálate un dibujo, una sonrisa o un rico desayuno, preparate un café mientras lees el periódico. Es como si oraras en silencio. Tal vez nadie lo note, tal vez te acostumbres a pasar desapercibido, ¿Pero sabes algo? ¿Tu que me lees? Practica a hacer una que otra cosa de esta manera, alimenta asi tu alma y de paso tu sentido de humildad.
Yo intento al menos tratar de escribir lo más seguido posible, me lean o no, hacerlo a solas o como dije antes, en la oscuridad. Aún asi estas palabras corren el riesgo de ser leidas en un futuro incierto, tal vez ni siquiera yo vuelva a ellas.
lunes, 25 de mayo de 2009
lunes, 18 de mayo de 2009
Recordando a Benedetti
Hoy me entere de la muerte del escritor uruguayo Mario Benedetti
No tengo mucho que decir, no le conoci
Y lo lei más bien poco
Pero uno de sus poemas me hirió como flecha y se ha convertido hasta hoy en unos de mis favoritos; "Si pudiera elegir mi paisaje"
Para él, para ustedes, que mejor que sus mismos poemas
A modo de despedida....
No tengo mucho que decir, no le conoci
Y lo lei más bien poco
Pero uno de sus poemas me hirió como flecha y se ha convertido hasta hoy en unos de mis favoritos; "Si pudiera elegir mi paisaje"
Para él, para ustedes, que mejor que sus mismos poemas
A modo de despedida....
Chau número tres
Te dejo con tu vida
tu trabajo
tu gente
con tus puestas de sol
y tus amaneceres.
Sembrando tu confianza
te dejo junto al mundo
derrotando imposibles
segura sin seguro.
Te dejo frente al mar
descifrándote sola
sin mi pregunta a ciegas
sin mi respuesta rota.
Te dejo sin mis dudas
pobres y malheridas
sin mis inmadureces
sin mi veteranía.
Pero tampoco creas
a pie juntillas todo
no creas nunca creas
este falso abandono.
Estaré donde menos
lo esperes
por ejemplo
en un árbol añoso
de oscuros cabeceos.
Estaré en un lejano
horizonte sin horas
en la huella del tacto
en tu sombra y mi sombra.
Estaré repartido
en cuatro o cinco pibes
de esos que vos mirás
y enseguida te siguen.
Y ojalá pueda estar
de tu sueño en la red
esperando tus ojos
y mirándote.
Pasatiempo
Cuando éramos niños
los viejos tenían como treinta
un charco era un océano
la muerte lisa y llana
no existía.
Luego cuando muchachos
los viejos eran gente de cuarenta
un estanque un océano
la muerte solamente
una palabra.
Ya cuando nos casamos
los ancianos estaban en cincuenta
un lago era un océano
la muerte era la muerte
de los otros.
Ahora veteranos
ya le dimos alcance a la verdad
el océano es por fin el océano
pero la muerte empieza a ser
la nuestra.
Hoy no tengo nada que decir
Estos poemas hablan por si mismos
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